Un espectáculo de danza y marionetas para público infantil a partir de 8 años.
Una coproducción de Djarama (Senegal) y la cía. Alicia Soto-Hojarasca (España)
Una mujer negra de familia modesta da a luz a un niña con albinismo. Se enfrenta a las creencias generalizadas sobre los albinos. Tiene miedo de perder a su hija, que por un lado es rechazada por la sociedad y por otro atrae a personas que harán cualquier cosa por sacrificarla.
A pesar de todo, la niña crece haciendo frente a todas las dificultades.
Los intérpretes del espectáculo
Seynabou Faye, Adama Cissé y Pape Baidy Diao formaron parte de un grupo de una veintena de chicas y chicos que se beneficiaron del programa de formación «Yaakaar», que significa esperanza en wolof, de la Asociación Djarama. Como su nombre indica, este programa tenía como objetivo devolver la esperanza a la juventud. Les ofrecía formación en artes (marionetas, circo, danza y teatro) a través de la intervención de profesionales en todas estas disciplinas. Alicia Soto intervino varias veces para la formación en danza.
Adrame Bangoura, artista de circo guineano, también intervino con los jóvenes en el marco de esta formación y seguidamente se unió a la compañía creada al final del programa Yaak’Art.
Dramaturgia y dirección de escena: Alicia Soto y Mamby Mawine
Dirección artística: Mamby Mawine
Coreografía: Alicia Soto
Interpretación: Seynabou Faye, Adama Cissé, Pape Baidy Diaw y Adramé Bangoura
Música: Dramane Dembélé
Concepción de marionetas y máscaras: Alessandro Fanni con la asistencia de Adama Cissé
Duración 40 minutos
Una coproducción de Djarama y la cía. Alicia Soto-Hojarasca
Nota de intención- Mamby Mawinee
Nunca me ha interesado hacer teatro sin ninguna finalidad. Siempre he creado espectáculos que tengan sentido. Para mí, el teatro debe servir para sensibilizar, denunciar lo que está mal y permitir cambiar la visión de la gente sobre algunos temas. ¿Por qué de esta creación? Mi hija Ramata nació con albinismo y creció en una sociedad en la que las personas como ella son discriminadas y marginadas por ser diferentes. Ramata tiene la suerte de estar rodeada de una familia que le ha dado un acceso a la educación, que le ha permitido hacer todo tipo de actividades… Sin embargo, muchos niños como ella viven en condiciones mucho menos favorables.
En Senegal, por ejemplo, hay mujeres que empujan a sus hijos albinos a pedir limosna todos los días bajo el sol, ignorando completamente los efectos desastrosos de este en su piel. Las mujeres albinas también son violadas debido a ciertas creencias que fomentan la idea que tener relaciones sexuales con ellas trae riqueza. Durante el período electoral en Senegal, muchas familias con niños albinos tienen que esconderlos por médo a que los secuestren para sacrificios.
En otros países africanos, los albinos son expulsados de los pueblos o cortados en pedazos y vendidos en el mercado para ser utilizados como amuletos.
Con este espectáculo, queremos demostrar cómo incluso personas supuestamente “normales” pueden ser crueles hacia aquellos con discapacidades o considerados diferentes. También buscamos crear conciencia entre niños, adolescentes y adultos sobre los problemas a los que se deben enfrentar las personas albinas.
Hemos elegido usar máscaras y marionetas en este espectáculo por su dimensión sagrada y ritual. Las marionetas ofrecen posibilidades de representación que no se pueden lograr sólo con el realismo. Las marionetas también tienen una apertura al mundo imaginario que solo nuestra alma infantil puede ver. En este espectáculo, también hemos elegido no usar texto, sino dejar que el cuerpo hable a través del movimiento. A veces, un gesto hacia alguien puede hacer más daño que un insulto o una bofetada. Una mirada puede herir como una bala de pistola. Esta historia se cuenta también a través de la música, que es una parte integral de la actuación.
Nota de intención – Alicia Soto
A la directora Mamby Mawine y a mí nos unen muchas cosas y entre ellas porqué o mejor dicho, para qué, creamos una obra de danza o teatro. Por todo ello decidimos crear esta pieza en colaboración, apoyada en una relación artística y personal de cuatro años, que empieza con el proyecto Yaakaar, en el cual me involucro.
En una sociedad occidental predominantemente blanca, el albino puede pasar casi desapercibido. Sin embargo, fui testigo del impacto que tenía la presencia de Ramata en los otros niños de su entorno y esto me dejó tocada y consciente de la grave problemática social y cultural que existía. Por lo menos en la parte de África en la que nos encontrábamos.
Así que hablar de la problemática de los albinos nos parecía más que necesario y la mejor manera de concienciar y mostrar esta injusticia, era creando una pieza para niños.
Y aunque la temática es dura, y la investigación sobre el tema nos sirvió para construir una dramaturgia, decidir qué queríamos contar y cómo; la obra está construida como una fábula, llena de poesía, donde las marionetas, nos ayudan a recrear unos personajes fantásticos. Las máscaras, la comedia del arte, nos da una pizca de humor, y el cuerpo, la danza, nos cuenta la historia desde la emoción, porque nuestra historia habla del miedo y el amor.
Del miedo a lo diferente, de todo aquello, que se sale de las normas, formas y colores establecidas o mayoritariamente existentes, y solo con el amor podemos aceptarlo.
La obra se ha creado en dos periodos de trabajo, durante el 2023 y finalizará en el 2024 con su estreno en el festival Djaram’Art.
En definitiva Miedo al color es un espectáculo de marionetas y danza, dirigida a niños a partir de los 8 años, interpretada por jóvenes. Una fábula poética que habla del miedo y el amor, cuya protagonista es una niña albina.
Hasta el momento no se tienen nuevas sesiones previstas
Le informaremos una vez al mes de las actividades de la compañia.